Epilogo

Frente a la puerta del castillo, iluminada por la luna nocturna.

 

Funf miraba la luna, absorta, con una expresión solitaria en su rostro. Era una hermosa noche de luna como la de hoy... cuando se separó de su irremplazable hermana que la había acompañado desde su infancia.

 

……¡Espera! ¿"Vee", a dónde vas?

 

……Lo siento, Funf... ya no puedo quedarme aquí. Yo, que he cometido un pecado grave, no merezco estar aquí.

 

……¡Eso no es... no es cierto! No condeno a Vee por tus acciones, y estoy segura de que Kuromu-sama...

 

……¡Incluso si es así! ¡Yo misma no puedo perdonarme!

 

……¡!?... Vee.

 

……Lo siento, Funf. Gracias por todo... Adiós.

 

El recuerdo de su conversación de despedida aún persiste en su mente... El recuerdo del arrepentimiento que permanece hasta el día de hoy, de no darse cuenta del sufrimiento de su preciosa hermana y no poder ayudarla. Sosteniendo ese recuerdo, Funf miró a la luna... y murmuró para sí misma.

 

[Vee... Kuromu-sama ya fue salvada. Kaito la ha salvado... Sin embargo, aún no has vuelto a casa, a nuestro hogar. Aferrándote a todo por ti misma, siendo imprudente por ti misma... Cargando toda la responsabilidad por ti misma y marchándote... Eres estúpida, Vee.]

 

Mirando hacia atrás, todo comenzó ese día. Fue el día en que Funf comenzó a llamarse a sí misma "el escudo de la familia" y siempre se ponía delante de la puerta...

 

Funf le dijo a Kaito que "no estaba usualmente en la puerta todo el día". Eso es tanto cierto como falso. Aparte de las veces en que tenía asuntos relacionados con su familia, Funf estaba básicamente siempre en la puerta. Nunca duerme ni come, simplemente se queda allí, cuidando la casa de su familia... y esperando a una persona.

 

[…Puedes volver cuando quieras. Hasta que Vee regrese, protegeré a la familia... Protegeré el hogar al que Vee regresaría...]

 

Tal vez sea, en cierto modo, un destino irónico. Funf, que sigue lamentando no haber podido ayudar a su hermana en el pasado, entrará en la batalla por ella en un futuro no muy lejano. Y eso significa enfrentarse al joven al que se había acercado... que intentó salvar a su hermana... Vier.

 

Mil años después de su separación... y la singularidad ha aparecido en el mundo. Quieran o no, la singularidad eventualmente tocará el tabú del mundo. Sin saber sobre un futuro así, Funf, mirando la luna, permanece melancólica.

 

(Fin del Volumen 7)

 

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